Por Ángela Venegas
Docente Trabajo Social UCEN
Desde hace años la juventud chilena se había caracterizado por abstenerse de los procesos electorales. Acusaban la ausencia de alternativas, desconfianza en los partidos y políticos e ineficacia del voto.
A partir de una mirada adultocéntrica, este fenómeno fue explicado por falta de interés y compromiso juvenil, invisibilizando las diversas expresiones emergentes; pero lo cierto es que este grupo siempre ha participado socialmente, sólo que a través de organizaciones que promueven formas autogestionadas y alternativas a la política formal, tales como los colectivos culturales, deportivos y estudiantiles, comunidades virtuales, entre muchos otros.
Tales agrupaciones han manifestado y canalizado sus luchas principalmente en las calles. Desde 2006, las y los estudiantes secundarios, y en 2011 los universitarios, iniciaron demandas por educación gratuita y de calidad; en el 2019 fueron los colectivos juveniles quienes estuvieron en primera línea en las protestas que dieron paso al estallido social y el consecuente debate que abrió el camino a la posibilidad de cambiar la Constitución.
Más que desinterés en la política lo que ha existido entre dicho segmento es un desacuerdo respecto de la forma tradicional de hacer política, lo que les ha costado una permanente invisibilización.
En el actual escenario, el círculo de exclusión se cierra con un bajo nivel de representatividad juvenil en las discusiones constituyentes. Según datos de Servel, de los actuales 155 integrantes de la convención, sólo seis son jóvenes sub 30. Lo que plantea la pregunta respecto a si estos seis representantes lograrán hacer escuchar y validar en el debate las preocupaciones y problemáticas juveniles de nuestro país o serán tratados como hasta ahora, desde la mirada adultocéntrica que infantilizará e invisibilizará sus demandas, ¿logrará esta convención ser realmente representativa si ya desde sus inicios deja fuera a uno de los grupos sociales que hizo presión para llegar a este histórico momento socio político?