Por Guillermo Fuentes Contreras
Director Ingeniería en Administración de Empresas UCEN
Se aproxima la Navidad y las festividades de fin de año, momentos muy anhelados para compartir y celebrar, por cierto, pero que pueden transformarse en una pesada carga financiera si no se manejan con responsabilidad.
Las compras navideñas significan un importante incremento en los gastos mensuales. Muchos consumidores recurren a créditos para financiar regalos, pero lo cierto es que se afecta de manera significativa el bolsillo de las personas. Se estima que en diciembre, los chilenos gastan en promedio entre un 20 y un 30% más que el resto del año. Entonces, algunas recomendaciones para no caer en esto, consisten en priorizar necesidades y llevar un registro y control de todas las compras. Tome papel y lápiz y realice un presupuesto para tener en cuenta cuanto puede pagar, planifique sus gastos.
Hoy endeudarse es muy caro, el retail, las tarjetas de crédito, los avances en efectivo, entre otros, cobran tasas de interés muy elevadas, que finalmente, hacen que se termine pagando dos y hasta tres veces el valor de un regalo. Si después de evaluar su situación, necesita un crédito, compare alternativas a un mismo plazo y monto, optando por la cuota más baja.
La Navidad tiene la emoción familiar de la sorpresa, de ese regalo anhelado, pero que no traiga consigo, deudas que transformara la alegría en lamentos. No comprometa recursos en un escenario futuro lleno de incertidumbre. En simple; no gaste más de lo que tiene.