Señor diputado Ignacio Urrutia,
Nuevamente insultas a Salvador Allende tratándolo de cobarde y otras cretinadas. Lamentablemente sólo soy un escritor y no diputado, porque de serlo habría estado en el hemiciclo y te habría hecho saber cuantos pares son tres moscas. El mundo entero conoce de la valentía de Allende, y la voz de un miserable con fuero y tribuna pública no cambiará eso al expresar unas cuantas bravuconadas.
Es fácil insultar a quien no puede defenderse, eso sí es cobardía, cobardía es defender a los violadores de los derechos humanos, al ladrón y genocida llamado Pinochet, a los torturadores, a los degolladores, a los que hicieron desaparecer a gente amarrada que no podía defenderse.
Ustedes, cómplices de la delincuencia de Estado ejercida por la tiranía militar, no son los dueños de Chile ni de la verdad histórica, son unos mentirosos, abusadores y calumniadores. Pero has de saber que somos muchos los chilenos que no estamos dispuestos, y jamás lo estuvimos, a aceptar que tipos como tú impongan su fascismo a todos los chilenos. No te tenemos ni a ti ni a tus secuaces el menor temor.
Te escribo estas palabras ejerciendo mi derecho ciudadano. Importándome un comino que tengas fuero, un fuero por lo demás, que el pueblo no te ha dado, sino que te lo ha dado una Constitución impuesta a sangre y fuego.
Alejandro Lavquén
Escritor