Por Rafael Urriola
Primerapiedra.cl
En la foto, por cierto con pocas mujeres, se ve reflejada la elite chilena. Falta sin duda, la cúpula eclesiástica católica para completar los responsables de lo que hoy somos. Los ideólogos del sistema actual o los sostenedores de la ideología imperante. Aquí se dibuja el poder en todo su esplendor.
Algunos se han sorprendido de las triquiñuelas usadas por los empresarios y sus gerentes para articular una organización delictual con pleno conocimiento del carácter de la asociación porque usaban nombre falsos, sistemas de conexión con teléfonos con “chapas”; claves, mensajeros camuflados, entre otras cosas. El cartel de La Legua tiene bastante que aprender de estos caballeros. Uno de ellos en la foto, por cierto. Estos señores -los de la foto- cada vez que defienden sus intereses y/o atacan las reformas, argumen
tan tres cosas: se va a perjudicar a la clase media y a los pobres; se va a desestabilizar el mercado y se va a lesionar la sana competencia que tanto beneficio le ha traído a Chile. El cartel de los papeles; el de los pollos; el del retail; el de las farmacias; las “pasadas” de Corpesca; de Soquimich, de Penta para eludir impuestos en colusión con políticos y familiares, muestran que quienes perjudican a la población, desestabilizan los mercados y lesionan la competencia son los propios empresarios agrupados en la CEP (en la foto) en la SOFOFA y en la ahora clandestina Asociación de Empresa Avícolas, interdicta por orden judicial por ser un asociación para delinquir como se demostró en el veredicto respectivo. Serán expulsados de la SOFOFA, decía uno de ellos pero ¿quien quedaría? La agrupación de expulsados sería probablemente mayor que la de los expulsadores. Por ello, nada pasará. Así, si en el parlamento se expulsara a quienes percibieron platas ilegítimas podrían quedar sin quorum para ninguna cosa y entonces todos callan esperando que la vorágine pase. La iglesia mal podrá expulsar a pedófilos y homosexuales cuando entre ellos hay demasiados, como se conoce hoy con gran frecuencia. ¿Por qué tanta consideración con ellos si no fuesen de un enorme poderío interno… y no pocos? Entonces como puede extrañar lo que arroja la encuesta de Chile 21 de este mes de octubre.
Las AFP´s, las grandes empresas, las Isapres, los bancos y las farmacias entre las instituciones que más perjudican (también figura el gobierno que aparece totalmente representado en la foto que encabeza este artículo) y los tribunales de justicia, probablemente porque la población no cree que llegarán realmente a castigar a los señores. Asimismo, como se aprecia en el cuadro siguiente -también de la encuesta de Chile 21- más del 90% de la población cree que son necesarias las reformas tributaria, educacional y laboral pero que han sido mal gestionadas por la administración actual.
En definitiva, la elite intenta desesperadamente recuperar la confianza pero, con tranquilidad y perseverancia, la población ya no cree que los mismos podrán hacer cosas diferentes. En el año 2016 habrá elecciones y lo único seguro es que la elite tiene razón en estar nerviosa de los resultados que de allí podrán salir.
“LA ELITE CHILENA EN EL DESPEÑADERO DE LA CORRUPCIÓN.” https://t.co/8EduW7owQG
RT @R_Montero_R: “LA ELITE CHILENA EN EL DESPEÑADERO DE LA CORRUPCIÓN.” https://t.co/8EduW7owQG
En base a los últimos acontecimientos que estamos viviendo como país, no me deja de sorprender lo sorprendidos que estamos.
Tal como expresa Rafael Urriola, la elite chilena está en el poder desde hace años, han coluido y atentado en contra del pueblo chileno, pero ¿Por qué?
La respuesta la encontramos en que Chile es el lugar que los catálogos del Capitalismo tendrían. Desde la dictadura que bajo Pinochet Estados Unidos intervino y empezó poco a poco a malear la situación, el contexto y a la gente. El resultado que vivimos hoy es: vivir sabiendo que aproximadamente 7 familias tienen la mayor riqueza de Chile, dejando al resto de la población a la deriva. Los derechos humanos y sociales se ven violentados día a día, beneficiando al tipo que tiene más dinero en el bolsillo, porque probablemente tiene acciones, un buen puesto o es hasta dueño de alguna multiempresa y no conviene estar en contra de esa gente, porque es esa gente los que son esposos, esposas, hermanos, hermanas y padres de la elite política.
En el fondo, lo que nos debería sorprender es seguir levantándonos el día a día, viendo como el mismo Estado está coluido con la gran elite chilena. Si tan solo el pueblo supiera que todo está en sus manos…