Convertirse en animal e ir construyendo el escenario es la idea de este novedoso proyecto desarrollado por alumnos de Informática de la Universidad Santa María.
A-Maze-Me es una aplicación móvil desarrollada por un grupo de alumnos de 4° año de Ingeniería Civil Informática para la Feria de Software de la Universidad Técnica Federico Santa María, que se llevará a cabo en noviembre.
La aplicación es en realidad un juego, desarrollado en el Engine Unity3D, que utiliza la tecnología de Realidad Virtual a través de una máquina llamada Oculus Rift. El jugador se pone en el rol de distintos animales y debe completar el escenario dado con la ayuda del dispositivo de realidad virtual.
Más que la solución a un problema, lo que hace A-Maze-Me es una oportunidad para familiarizarse con una tecnología que aún no sale al mercado. “Nuestra motivación principal es ocupar la tecnología de realidad virtual para sorprender a las personas con nuestro software y que vivan una experiencia nueva e innovadora” explica el jefe de proyecto, Diego Concha.
Junto a Concha, en el proyecto trabajaron sus compañeros de 4° año, Erick Barrera, Gonzalo Pavez, Cristián Cajiao y Sebastián Vergara.
Técnicamente, el software ocupa el game engine Unity3D junto con el SDK que provee OculusVR para el manejo del dispositivo de realidad virtual, junto con un control que se pueda conectar a un PC con SO Windows (de preferencia de Xbox). El jugador controla la cámara del juego con el Oculus Rift mientras que el movimiento y las acciones del personaje serán mediante el control.
“La experiencia fue extraña y curiosa, ya que en nuestro equipo nadie se conocía previamente (inclusive llegó una persona posterior a que se formara el equipo), pero logramos unirnos de muy rápidamente, logrando que todos colaboraran con sus ideas y habilidades. Ha habido dificultades en cuanto a la tecnología que decidimos ocupar, pero nada que una junta de equipo no haya podido solucionar”, explica Diego Concha.
Y agrega, decidimos hacer algo que otras personas lo hubieran visto como un caso perdido o una locura inmensa, con demasiados riesgos para poder ser realizado; pero a pesar de estos prejuicios decidimos “tirarnos a los leones” y seguir con esta idea tan llamativa tanto técnicamente como a nivel de usuario”.