Por Dr. Franco Lotito C. – www.aurigaservicios.cl
Académico, escritor e investigador
Primero que todo, tengamos muy presente que un verdadero amigo o amiga es aquella persona que hace todo lo que sea necesario para levantar nuestro ánimo, incluso, si para ello tiene que hacer el ridículo. Es quién se ríe de nuestros chistes aunque éstos sean viejos y repetidos. Es quien se levanta a las seis de la mañana para acompañarnos a trotar aunque deteste hacer ejercicio, y lo más importante: un verdadero amigo o amiga es aquella persona que siempre tiene un gran abrazo listo y preparado para nosotros para darnos afecto, ánimo y energía.
Ahora bien, una serie de estudios realizados por Judith Sills, experta norteamericana en psicoterapia y doctorada en psicología, sacaron a la luz tres perfiles de mujeres a las cuales sus amigas les cuesta “tragar”, ya que aunque se reúnen, se ríen y comparten historias, alegrías, penas y tragedias personales, suele haber una de ellas que provoca en las demás muchos anticuerpos y resistencia.
Si bien, las demás amigas pueden tenerle algo de cariño a esta persona, hay momentos en que el resto se mira y observa entre sí con cara de mártires y de desesperación, especialmente, cuando aparece aquella que se arregla como para ir a una fiesta de gala solo para acompañar a una amiga para ir al supermercado, o bien, la mujer que se queja y se lamenta de todo o, finalmente, aquella “amiga” que cuestiona y critica cada acto realizado por las otras mujeres del grupo. Revisemos algunos de estos tipos:
- La “amiga perfecta”: no existe nada más detestable para una mujer, que pedirle a una amiga que la acompañe de compras al supermercado y observar que ésta llega flamantemente bien vestida, arreglada y con un regio peinado, como recién salida de la peluquería. Si bien, en la etapa de adolescencia resulta relativamente fácil mantenerse al día con la moda, destinar dinero para adquirir prendas de vestir y arreglarse para una salida de fiesta, la situación cambia completamente cuando llegan los hijos y hay una carga laboral de por medio, condición que dificulta que el resto de las amigas puedan “vestirse de gala” sólo para ir de compras al supermercado. Sin embargo, allí llega la amiga perfecta, con una vida social muy activa y que pareciera estar asistiendo constantemente a fiestas y eventos sociales sin problema alguno. Incluso más: acude a los actos y actividades de los hijos viéndose estupendamente y con una gran sonrisa en la cara.
No obstante que las amigas de “la mujer perfecta” la pueden mirar con algo de envidia o con recelo, también podrían comenzar a observar qué es lo que ella hace y la forma en cómo aborda el diario quehacer, que le permite destinar tiempo para el cuidado de sí misma y llegar a una cita o reunión viéndose como modelo, con una única finalidad: evaluar la posibilidad de seguir e imitar su ejemplo.
- La “amiga permanentemente quejumbrosa”: de la amplia gama de mujeres que pueden sacar de quicio al grupo de amigas, la quejumbrosa es la que se lleva los premios y la que causa gran malestar, por cuanto se trata de la chica que se queja constantemente de todo, sin que –objetivamente– exista una razón aparente para que eso suceda, ya que es aquella que llega a la reunión de amigas reclamando porque hace mucho calor o porque hace mucho frío, porque no le gustaron los últimos zapatos de moda que se compró, o porque la comida estaba desabrida.
No obstante lo anterior, las “amigas quejumbrosas” pueden ser buenas amigas y ser capaces de ver una salida a aquellos problemas que no son suyos y que podrían estar aquejando a alguna de las amigas del grupo.
- La “amiga insidiosa”: en relación con este tipo de amigas, es necesario que muy pronto se prenda una luz de alerta y se preste máxima atención, ya que se trata de la amiga que en forma silenciosa y encubierta va carcomiendo la confianza de sus amistades por intermedio de comentarios maliciosos acerca de las potenciales “infidelidades de los maridos y parejas”, de los “kilitos extras” que han ganado algunas de las amigas del grupo, lo “mal vestida” que está una de ellas, u otras ironías de similar estilo que terminan por amargar la noche de fiesta del grupo.
Digamos finalmente, que para la Dra. Judith Sills, la “amiga insidiosa” ni siquiera merece ser llamada amiga, en función de lo cual, es la única de los tres tipos de mujeres que –por sanidad mental y emocional– debería ser excluida del grupo, ya que el objetivo de este tipo de “amigas” es amargarle la vida a las demás y hacerles ver que sus vidas carecen de glamur y de alegría, y que no son tan bellas y atractivas como las amigas piensan.