Por Pablo Varas
La derecha tiene del año que le pidan….
Por estos días el asunto de los inmigrantes hace correr ríos de tinta. Para la derecha hay extranjeros buenos y otros malos. Los buenos son aquellos que trabajan, emprendedores, los malos esos que cometen delitos, que se portan mal.
Sucede que la derecha sencillamente es analfabeta, ignorante, una patota de porros y con un nulo conocimiento de la historia de Chile, posiblemente con haber leído el Icarito, ya era suficiente para no pasar vergüenza como la actual.
Extranjeros fueron los que descubrieron y conquistaron Chile, Diego de Almagro, Pedro de Valdivia, Inés de Suarez, esos se quedaron, robaron tierras, oro, y trataron como esclavos a la población mapuche. Se paseaban asustando a nuestros pueblos originarios con el infierno y el fuego eterno. Se repartieron las tierras a su regalado gusto y antojo, aunque no le salió gratis, no hasta los días actuales.
Todos los descubridores y conquistadores tienen calles y poblaciones a su nombre y estatuas, (me siento pagado cuando las cagan las palomas), las hay en casi todas las plazas de los pueblos de la angosta y larga franja de tierra. Hay escuelas que llevan sus nombres. Grandes cuadros muy bien pintados, pongo en duda que todos estos extranjeros hayan tenido los ojos azules.
Extranjeros fueron los que cruzaron con San Martín la cordillera para sellar la Independencia de Chile, no se acuerda el porro Piñera ni Ossandon que O Higgins estaba herido y llegó a los campos de Maipú cuando los españoles ya habían sido derrotados por San Martín, en este caso los españoles eran extranjeros malos. Se les recuerda a los equipos de propaganda de la derecha chilena UDI/RN/PIÑERA/OSSANDON que el Capitán General, el primero y verdadero, murió en territorio extranjero, falleció en Perú, y allá dejó descendencia.
La escuadra libertadora tenía mando extranjero, no era chileno el que mandaba todos los barcos, Almirante Cochrane se llamaba y no trabajó gratis, se le pagó por sus servicios.
Las brillantes frases para el bronce del porro Piñera, Ossandon y otros patriotas/nacionales de la UDI y RN para referirse a los extranjeros, chocan brutalmente con las escritas por Vicente Pérez Rosales en “Recuerdos del Pasado”. Se trata sobre la llegada de alemanes al sur de Chile, conocida como la migración alemana. Debemos hacer notar que entre esos esforzados rubios de ojos azules, se encontraban los antepasados del Mathei, Stange y otras lumbreras históricas de las Fuerzas Armadas…gente emprendedora.
A Chile siempre han llegado extranjeros, buenos y malos, y desde antes que existieran los paraísos fiscales. Los antepasados de Golborne no están en la Araucanía. Sucede que ahora hay extranjeros que son más visibles, los vemos vendiendo jugos de frutas en sus carritos entregados por el Fosis, y los que están en lista de espera, venden ceviche en el puente Los Carros en el sector Mapocho.
Del extranjero llegó el cura O reilly, procesado y condenado por abusos sexuales a una menor. Cumple su condena en cómodas habitaciones de una residencia formidable en un barrio de buen y caro perfume en la capital. Karadima, cuyo apellido nada tiene que ver con el pueblo Diaguita, también se le obligó a rezar para pagar sus culpas…tiene pasado migrante, extranjero malo.
En la corta historia de Chile, son muchos los políticos y ex presidentes que tuvieron que hacer sus maletas y subirse a un barco, para salvar el pellejo, y Chile también recibió a otros que también venían arrancando, con tan buena suerte que hay colegios que hoy día llevan su nombre. Andrés Bello es un caso especial.
Cuando el migrante Paulman dice voz al cuello que Chile es una “gran opción para hacer negocios”, lo hace desde su sillón cómodo de Cencosud. Sus palabras dejaron rojas las manos del empresariado con tanto aplauso. Piñera totalmente entregado al modelo que tanto defiende, Hermann von Mulembrock, hasta las lágrimas y el presidente de Perú coincidiendo con todos los jugadores del equipo CasaPiedra.
“Muchas de las bandas de delincuentes en Chile son de extranjeros”, así repican las palabras del porro Ossandón, Piñera y de diputados y senadores de la derecha chilena. Esos que les gustaría que Chile estuviera en París o en alguna esquina de Europa, es que las ganas de parecerse a ellos son incontenibles, casi una cistitis eterna. Deben ser muy encantadores los atardeceres en los paraísos fiscales…..mmmmmmmm
Las boletas falsas que se paseaban en el parlamento eran entregadas por delincuentes a otros delincuentes. Longueira, Marta Esasi, el mendicante Moreira, el PRO, Fuentes, ese dirigente social y ahora diputado DC, en realidad, casi la totalidad de ilustres parlamentarios financiados con dinero de todos los chilenos. Son delincuentes los que se convirtieron en empleados de los grandes empresarios.
No hay duda que este tema, el de los extranjeros tiene como sentido ser una cortina de humo para salvar a Piñera de sus negocios con una pesquera peruana, mientras el Estado defendía el territorio chileno en La Haya. Hay perversión escondida en esa búsqueda de votos para llegar a La Moneda, a la que la derecha no le hace asco a nada.
Y un último detalle: el abuelo materno de Salvador Allende era ciudadano Belga, llegó a un pueblo del sur, y se instaló con un negocio.