Omar Villanueva Olmedo
Director OLIBAR ASConsult
Lic. Cs. Económicas & Adm Fen Universidad de Chile
ovillanueva.comunica@gmail.com
Anticipar, por ejemplo, en diciembre 2014 próximo la variación del IPC a doce meses y el crecimiento del PIB anual del año transcurrido, es probablemente más certero que hacerlo 15 meses antes. Pero, aun así, hay que considerar que mientras no se conozca las cifras reales, esas anticipaciones pueden ser erróneas.
Sin embargo, lo real es que: en septiembre del 2013 se anticipó que la inflación del año 2014 sería 2,8% y que el PIB anual crecería entre el 4 y el 5%. Los modelos que se hayan empleado para proponer estos valores hasta ahora aparecen como equivocados o muy equivocados. Porque a esta altura de este año el IPC a 12 meses es superior al 4% y el PIB ha crecido menos del 3%. Aunque las diferencias en números absolutos son pequeñas, las desviaciones son muy altas, para la inflación nada menos que el 40% y para el PIB la desviación respecto a lo pronosticado podría llegar a un 50%, y ambas cifras de carácter negativo: ¡Una inflación cercana al doble de la anunciada y crecimiento casi la mitad del anticipado! Cada lector le dará una de calificación a estos resultados.
Ahora se anuncia que para este año 2014 se anticipa una inflación del 4,1% y de un 2,8% para el 2015 y un PIB entre el 1,75 y 2,25% para este año 2014 y una inflación de 2,8% para el 2015.
Hemos puesto estos dos factores en el orden que nos parece corresponde: 1° la inflación y 2° el crecimiento, por varias razones. Pero hay una que consideramos importante. Los resultados anteriores y los datos que se anticipan para fines de año, responden a un proceso de baja de 25 puntos bases de la TPM, que empezó en enero del 2012 del 5,25 al 5%, hace ya 32 meses, porque ya se anunciaba una baja del crecimiento, pero no se daba mucha importancia a lo que podría ocurrir con la inflación, lo que advertimos reiteradamente lamentablemente sin resultado. En cuanto a: ¿Qué y cómo hacer para el crecimiento? aunque esté relacionado es materia de otro costal y amerita una nota especial al respecto de nuestro gabinete.
Han pasado más de dos años en que ha estado rondando esta declinación del crecimiento y las bajas de TPM todavía no logran revertir la situación después de ya transcurridos tres años de declinación, pero en cambio sí han elevado sustancialmente los precios en la economía. Y no son resultados de los cuales haya que alegrarse pues es una verdadera reforma tributaria regresiva y en este caso… inconsulta.
Este comentario – y anteriores emitidos sobre la materia – solo tiene la intención de ayudar a pensar y promover cambios -positivos y de interés nacional- en quienes sean responsables de las anticipaciones, de sus métodos y seleccionar las competencias requeridas para decidir sobre las medidas tendientes a mantener la inflación dentro de los límites adecuados para el crecimiento y por ende el poder de compra de la población. Reiteramos la necesidad de contar con una Agencia de Estudios del Futuro (ADEF) que aporte a la capacidad de anticipación estratégica en diferentes ámbitos que la requieren en nuestro estado nación.
Patrióticamente, en vísperas de Fiestas Patrias.
RT @gvalpo: Columna ¿Y de Nuevo lo mismo con la TPM y el IPC? por Omar Villanueva Olmedo
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