- Gerente general de Segal, Marcelo Samur, aseguró que tal cual está concebida la Reforma Laboral “no impulsará la productividad ni favorecerá la contratación de trabajadores y, en consecuencia, impactará negativamente en el crecimiento del país”.
Marcelo Samur, gerente general de Segal (estudio jurídico que representa a más de mil Pymes), advirtió que frente a una “reforma que no reconoce la realidad de las micro, pequeñas y medianas empresas, el Legislativo debe considerar seriamente en excluirlas del proyecto porque de lo contrario se pone en grave riesgo a un sector que representa al 98,5% de las empresas del país. Y todo en virtud de que se insiste en aplicarles las mismas condiciones que a las grandes empresas, que representan el 1,5%. Una obstinación peligrosa”.
“Claramente el proyecto no contribuirá a combatir la desigualdad de ingresos ni la injusticia social. Y peor, tal cual está concebido, no impulsará la productividad ni favorecerá la contratación de trabajadores. En consecuencia, impactará negativamente en el crecimiento del país, ya perjudicado por otros factores”, explicó.
Samur dijo que espera que los parlamentarios escuchen los planteamientos de las principales organizaciones que representan a las Pymes en el país y excluyan de la iniciativa a este importante motor de crecimiento. Y aún más, comiencen a trabajar una agenda urgente Pro-Pyme con una mesa de trabajo que involucra a todos los gremios de este sector.
En este contexto, sostuvo que es importante recordar que durante el primer mandato de la Presidenta Michelle Bachelet se promulgó la Ley 20.416, que estableció normas especiales para las Empresas de Menor Tamaño, reconociendo la naturaleza propia de este tipo de empresas, algo que hoy la reforma laboral no considera.
Segal, junto a Conapyme, ha estado impulsando en los últimos meses una serie de iniciativas a favor de la micro, pequeña y mediana empresa. Se reunieron hace unos meses con los parlamentarios de Bancada de Senadores Pro-Pyme, quienes se comprometieron a materializar a la brevedad una agenda corta en favor de este sector productivo, que recoja las principales inquietudes y problemas que enfrenta hoy.
Anacronismo peligroso
Por otro lado, Samur recalcó que “la reforma laboral es un anacronismo peligroso. Nos hace pensar que está regulando en un entorno vencido de los años 70 y 80 con una fuerte carga ideológica. Lo que era o fue bueno (suponiendo que así lo fue) no tiene por qué serlo ahora y mañana” señaló el gerente general de Segal, Marcelo Samur, estudio jurídico que representa a más de 1000 Pymes.
Respecto a quienes intentan seguir planteando lo de la negociación por ramas, precisó que “hablar de eso en estos años y para una economía con una estructura corporativa con predominación Mipyme es una locura”.
Dijo que, por otro lado el Gobierno propone, entre otras cosas, que los beneficios de las negociaciones (como la definición de turnos en caso de huelga o piso de la negociación) no sean extensivas a los trabajadores no afiliados, entregando al sindicato un poder superior al de los inversionistas.
“La mejor forma, no la única, de aumentar la estabilidad laboral es con un mercado laboral tendiente al pleno empleo. Es ahí donde el poder de negociación de los trabajadores – de manera directa y sin pasar por un sindicato- puede tener una posición incluso superior a la del empleador. Si no hay pleno empleo, no creo que se puedan garantizar más y mejores trabajos a través de negociaciones ramales u otras ideas similares”, destacó.
“El mundo desarrollado está tratando de cambiar el exceso de sindicalización y de rigideces del mercado, pensando en otras necesidades, como por ejemplo, la flexibilidad horaria y contractual; el trabajo domiciliario o fuera de las oficinas; la disminución de costos de salida para el trabajador y empleador, capacitación, etc”, puntualizó.