Un hombre de 34 años llegó hasta el servicio de urgencia del Hospital Barros Luco donde falleció, luego de una presunta ingesta de pastillas con cianuro. Situación obligó a un rápido operativo en la sala de espera del recinto, hasta determinar con certeza la causa de esta emergencia.
La químico farmacéutica y doctora en toxicología de la U. San Sebastián, Pamela Cámpora señaló que “la ingestión o inhalación aguda de cianuro causa inconsciencia inmediata, convulsiones y muerte en un período que puede variar entre 1 y 15 minutos. Asimismo, su ingestión causa congestión y corrosión de la mucosa gástrica”, indicó la académica.
La especialista agregó que cuando se ingiere en dosis menores a las letales “provoca vómito, cefaleas, vértigo, respiración rápida, descenso de la presión arterial, aumento del pulso e inconciencia”.
Cámpora explicó que “las sales solubles de cianuro, así como el ácido cianhídrico son tóxicos de acción muy rápida y su mecanismo de toxicidad es bloqueando la cadena respiratoria lo que determina una hipoxia tisular y acidosis láctica”.
En otras palabras, “la intoxicación aguda por cianuro, interfiere en la utilización de oxígeno por parte de las células y por consiguiente provoca una disminución en la entrada de oxígeno a los tejidos”.
También precisó que “cuando se trata de una intoxicación aguda se inicia un marcado aumento de la respiración con posterior apnea, compromiso de consciencia y disminución de la presión arterial. Posteriormente se generan temblores y convulsiones. Y en la fase cardiorrespiratoria es cuando disminuye la presión arterial, se produce cianosis y la muerte”.
¿Qué hacer?
Ante el caso de una persona intoxicada con cianuro, Cámpora dijo que el personal que asiste “debe proteger sus vías áreas y cutáneas para evitar entrar en contacto con los vapores de cianuro que hayan quedado en el ambiente o que este expeliendo el cuerpo del intoxicado”. Además hay que aislar el lugar donde ocurrió este hecho”.
La académica añadió que se debe trasladar al paciente a una atmósfera no contaminada, es decir, retirar de la fuente de exposición y mantener sus funciones vitales y continuar con el protocolo de manejo de intoxicaciones para evitar la absorción completa del cianuro y si es viable y en función del tiempo, administrar el antídoto disponible para este compuesto.