Por Dr. Franco Lotito C. – www.aurigaservicios.cl
Académico, Escritor e Investigador (UACh)
“Algunos finales son felices, otros en tanto, son… necesarios”.
“El destino –o Dios– a menudo aleja a ciertas personas de tu camino por alguna buena razón. Piensa dos veces antes de ir tras ellas”.
Durante estos últimos años me ha correspondido recibir en mi consulta a diversos pacientes muy afectados emocionalmente, a raíz de una dolorosa –y a veces “inesperada”– ruptura amorosa. Con los tiempos que corren, este tipo de rupturas se han incrementado sustantivamente –y a todo nivel–, sea que la pareja esté casada y tenga hijos, sea que se trate de personas solteras y que convivan sin hijos, sea que la pareja comparta el mismo sexo, etc.
A fin de ilustrar de mejor manera el tema a desarrollar, tomaré un caso –y algunas recomendaciones– tanto de mi propia consulta, como también de la psiquiatra Tracy Cabot, cambiando, naturalmente, el nombre de la paciente con el fin de resguardar su identidad y privacidad. Es así por ejemplo, que tomaré el caso de Marisol, joven profesional de 25 años, sin hijos, quien llega a la consulta acompañada por su mejor amiga, reportando “estar totalmente destruida y devastada” tras el término de su pololeo de tres años, a pesar de que ya llevaba varios meses en una relación de pareja poco feliz.
Al comenzar a indagar en su caso, Marisol señaló que se “había dado cuenta que ella y su pareja venían mal, pero nunca tanto como para terminar de la forma en cómo se produjo el término de la relación”. Lo primero que llama la atención en estos casos, es que aún cuando todas las señales indican que el siguiente paso que se aproxima en la relación de pareja es una ruptura amorosa, muchas personas no son capaces de enfrentar y, menos aún, de aceptar esta dolorosa realidad.
A raíz de la “inesperada” ruptura unilateral, Marisol estaba sufriendo de insomnio y de noches enteras sin dormir, se sentía con el ánimo muy bajo, experimentaba tristeza profunda y tenía accesos de llanto descontrolados, todo lo cual, no dejaba ver a esta persona que era factible salir adelante, recuperarse de la ruptura y sanar las heridas emocionales sufridas. En función de esta experiencia, es posible entregar algunas recomendaciones a quienes están viviendo una ruptura amorosa y que le permitirán “sobrevivir” de la mejor forma posible los períodos más complicados de esta condición.
LOS PRIMEROS DOS O TRES DÍAS DESPUÉS DE LA RUPTURA.
Estos son, sin duda alguna, los momentos más complicados y difíciles para quienes sufren una ruptura amorosa, por lo tanto, la primera recomendación es no reprimir los sentimientos que embargan al sujeto: si la persona se siente triste, entonces debe vivir esa tristeza en compañía de una amiga o amigo querido y que sea cercano al sufriente. Si la persona desea llorar a mares y en forma desconsolada, entonces que lo haga y sin frenarse. Si el sujeto afectado se siente muy ansioso y le viene el deseo imperioso de comer en exceso, que coma lo que quiera y sin sentirse culpable. Si desea escuchar canciones tristes o ver películas con finales trágicos, que lo haga, asimismo, sin reparos. Por otra parte, si la persona afectada desea estar sola, que tenga presente, que no está obligada a estar con gente a su alrededor.
La única cosa que le está vedada a la persona, es intentar llamar a la ex pareja, buscarla o ir a verla, escribirle un correo electrónico o mandarle mensajes por whatsapp o por cualquier otro medio. Lo recomendable, en estos casos, es apagar el celular y no contestar llamadas, por cuanto, la persona debe aceptar y entender que la relación se acabó. Se terminó. Y aún cuando no se trata de no volver a ver o conversar con la ex pareja, para hacer esto, es decir, volver a verla, es necesario que la persona esté bien, que se sienta fuerte y recuperada, y en un mejor estado de ánimo.
La Dra. Tracy Cabot, psiquiatra norteamericana, autora del libro superventas “Cómo lograr que un hombre se enamore de ti”, recomienda a sus pacientes y lectores que si la persona, pese a todo, siente el deseo de decirle a su ex pareja algunas cosas que quedaron “pendiente”, lo mejor, es poner por escrito en una carta todas aquellas cosas que quisiera decirle, con el objetivo de desahogarse y sacarse de encima las penas, las rabias y/o las frustraciones que la embargan, pero SIN ENVIAR LA MISIVA, ya que, de acuerdo con la experiencia y las investigaciones, el sólo acto de expresar y poner por escrito lo que la persona experimenta, basta para que se sienta más liberada.
LA PRIMERA SEMANA
Después de transcurrido la primera semana, la persona debe pensar seriamente en “rearmarse” a sí misma y ponerse nuevamente de pie. Para lograr este primer objetivo, lo recomendable es tomar todas las fotos o recuerdos en que aparezca la ex pareja y esconderlas en el fondo de un cajón, o bien, ponerlas en una caja y guardarlas en el desván. En el peor de los casos, si existe mucha rabia, la persona puede realizar lo que se denomina un “ritual de limpieza”, es decir, romperlas y quemarlas simplemente.
Si en algún momento, la persona advierte que está cayendo en la “idealización” de la ex pareja, entonces la recomendación es muy simple: haga un listado con todos los defectos, debilidades y fallas de la ex pareja, de modo tal, que cuando a la persona le baje la nostalgia, relea los numerosos defectos escritos en el listado o recuerde las cosas negativas que hizo o dijo el sujeto, y esa nostalgia o deseo de volver a ver a la ex pareja desaparecerá casi de manera inmediata. Se sobre entiende que esta lista tampoco debe ser enviada, ya que la prohibición de contactarse con la ex pareja aún sigue en pie.
En lugar de intentar retomar el contacto, lo recomendable es que la persona afectada comience a salir y que piense en distraerse y divertirse con sus amigos y amigas. Esto es un fuerte mensaje dirigido a la ex pareja y lo muestra a uno como una persona fuerte, que está recuperándose, que no está sufriente, destrozado(a), devastado(a) y “desfalleciendo de amor” por la ex pareja. A todo esto: advertir que alguien es capaz de ponerse nuevamente de pie genera respeto en la otra persona. Y aunque al inicio parezca algo difícil de lograr, el hecho de salir con los amigos, disfrutar el momento y volver a reírse de uno mismo o de los defectos de la ex pareja, representa el inicio del proceso de auto sanación y, sin que la persona se dé cuenta, comienza a sentirse cada vez mejor.
LA SEGUNDA SEMANA
Esta semana debe estar dedicada a subir el ánimo y a reafirmar la propia autoestima. La persona debe sentir que vale mucho, que es valiosa, que es capaz de proponerse algunas metas de mediano y largo plazo y que puede lograr muchos objetivos en forma independiente. Mientras tanto, la prohibición de llamar o contactar a la ex pareja sigue en pie. Y así como se hizo un listado con los defectos de la ex pareja, ahora lo recomendable es hacer un nuevo listado, pero con las fortalezas, cualidades y virtudes de uno mismo y tener muy claro, que todas estas cualidades siguen estando presente en la persona, no obstante la ruptura que se ha experimentado. En estas dos semanas, la persona debe proponerse aprovechar las salidas con sus amigos y amigas, salir al cine, salir a bailar, realizar alguna actividad física con el objetivo de sentirse y verse bien, ya que el ejercicio físico libera muchas endorfinas, las que reaniman el cuerpo y el espíritu, mejoran el ánimo y aleja los momentos depresivos.
LAS ÚLTIMAS DOS SEMANAS.
De acuerdo con las recomendaciones, la prohibición de contactar en cualquiera de sus formas a la ex pareja sigue vigente, por cuanto, el período más doloroso ya está quedando en el pasado y la persona debe pensar en retomar su vida normal, pero con un agregado adicional: debe ser un tanto egoísta con el tiempo y dedicárselo a uno mismo, y hacer sólo a aquello que la persona realmente quiere hacer. En la medida de lo posible, sería recomendable tomarse algunos días de vacaciones con el fin de proyectarse hacia el futuro y comenzar a definir qué es lo que la persona desea para su vida de ahora en más, es decir, debe responder a la siguiente pregunta: ¿Qué quiero hacer ahora con mi vida? Algunas posibilidades son iniciar estudios, o bien, continuar con estudios de postgrado, concentrarse en el trabajo, buscar algún tipo de hobby que sea de su interés, si hay un hijo, tener la precaución de cuidar y dedicarse a ese hijo, por cuanto, en este momento, se es absolutamente libre y ello representa una gran oportunidad para llevar a cabo cosas completamente nuevas y que constituyan un verdadero desafío. Incluso, iniciar una nueva relación.
La última recomendación, es hacer un tercer listado con las metas que desea lograr la persona, así como los pasos que serán necesarios dar, con el fin de conseguir tales metas y objetivos. Recuerde, finalmente, la frase que dice que la felicidad está dentro de uno y no “al lado de alguien”, especialmente, si el sujeto en cuestión, no resultó ser la persona que uno habría querido tener al lado.